Cómo las ondas de choque pueden ayudar con la disfunción eréctil
Con varios millones de personas afectadas en todo el mundo, la disfunción eréctil (ED) es una condición muy extendida con una amplia variedad de causas. Junto con el estrés, el sufrimiento psicológico o la hipertensión, la reducción de la circulación sanguínea es una de las principales causas de origen orgánico. En este caso, la terapia con ondas de choque extracorpóreas (ESWT) es una opción de tratamiento poco dolorosa, eficaz y no invasiva.
¿Cómo funciona el tratamiento con ondas de choque para la disfunción eréctil?
Las formas convencionales de terapia suelen limitarse a tratar los síntomas. Además, estos tratamientos pueden producir interacciones o limitar la espontaneidad. El tratamiento con ondas de choque, en cambio, se centra en el enfoque causal. Es decir, la ESWT estimula el flujo sanguíneo en el pene, lo que puede conducir a una mejora de la función eréctil:
los estudios muestran que, en caso de disfunción eréctil vascular, la ESWT provoca una aceleración del metabolismo local y promueve la hiperemia (aumento del flujo sanguíneo) y la angiogénesis (formación de nuevos vasos sanguíneos).
Además, la »mecanotransducción«, la conversión de señales físicas en procesos moleculares intracelulares, libera una serie de sustancias bioquímicas, como el VEGF, los óxidos nítricos (NO) o la sustancia P.
¿Qué son las ondas de choque?
Las ondas de choque son ondas acústicas de alta energía que pueden generarse de diferentes maneras. En la década de 1980, las ondas de choque se utilizaron por primera vez en medicina para el tratamiento de los cálculos renales sin cirugía. Más adelante, la ESWT se utilizó también para el tratamiento de, por ejemplo, indicaciones ortopédicas, neurológicas y urológicas como la disfunción eréctil, la induratio penis plastica (IPP) y el CPPS (síndrome de dolor pélvico crónico). Según el ámbito de aplicación y la indicación, se utilizan ondas de choque de alta o baja energía.
En medicina, se generan de forma extracorpórea, es decir, fuera del cuerpo, en un aplicador y se introducen en el tejido objetivo con la ayuda de un medio, normalmente un gel. En este proceso no se daña ningún tejido circundante. La zona focal, el área efectiva con mayor densidad energética, no se genera hasta que las ondas no se agrupan.
El procedimiento puede realizarse sin anestesia y de forma ambulatoria. Una terapia comprende aprox. entre 6 y 10 sesiones y con un tiempo de sesión de unos 15 minutos, el gasto de tiempo es bajo tanto para el usuario como para el paciente.
El tratamiento supone un método de bajo riesgo, poco doloroso y con pocos efectos secundarios, lo que le convierte en una alternativa prometedora a las terapias convencionales.
¿Cómo se encuentra un usuario de ondas de choque para el tratamiento de la disfunción eréctil?
Los pacientes pueden buscar un especialista cerca en el sitio web de la ED:
Médicos e institutos
Los nuevos usuarios de ondas de choque pueden inscribirse en este sitio web a través de
